Una Fe "razonable" y una Razón "confiada" (parte II)
Pensando cree
Es normal pensar que con el sólo hecho de decir "creo" la fe está ya inscrita en el corazón de la persona. Pues, aunque parezca extraño lo que voy a decir, la fe tiene que ser pensada para poder ser creíble.En la dinámica de la fe cristiana, Dios es el que ha salido al encuentro del hombre, por medio de la revelación, y su máxima expresión ha sido la Encarnación de su Hijo, su vida, pasión, muerte y resurrección. No le estamos creyendo a "artículos", sino más bien, le estamos creyendo a una persona, en la que se encierra el misterio del Reino de Dios que vino a presentar a los hombres. Mas no basta con decir "creo", sino que cuán razonable (no estoy diciendo entendible, porque hay misterios que no alcanzamos a comprender) es para mí las verdades que me han propuesto. Un ejemplo de la duda creyente lo tenemos en la Madre de Jesús, cuando le dicen que va a ser la Madre de su Señor, no viene y dice: "hágase", sino, "¿cómo va a ser esto posible si no conozco varón?"
La razón tiene que pensar para poder creer, recordar simplemente que la fe en la definición que da Santo Tomás dice que es "cogitare cum assum", pensar con asentimiento, vale decir, es pensar con el corazón, ya que estamos frente a una persona no un contenido.
Tienes mucha razón en lo que dices, pero en mi experiencia la Iglesia chilena ha dejado muy de lado este aspecto.
ResponderBorrarHabiendo cursado 12 años en un colegio Salesiano, recién pude venir a comprender la importancia de la razón en la universidad, porque un profesor nos hizo leer el tratado de la ley de Santo Tomás. Los católicos que no han tenido esta o similar suerte se quedan por la vida creyendo que tienen que callar ante los ataques de los ateos o agnósticos, porque creen que la fe no puede defenderse con buenas razones, y así muchos de ellos van relegando la fe a una parte ínfima de la vida.