Teología del Gusano

Hace años atrás, cuando empezaba mis estudios en teología me encontré con un libro, muy interesante (lástima que no lo he podido encontrar nuevamente), que se llama "La Teología del Gusano" de José Vicente Bonet, haciendo referencia a un texto del Antiguo Testamento en que dice que "todos somos gusanos ante Dios", y creo que vale la pena mencionarlo, ya que esta visión de la relación con Dios lleva a un simple moralismo (tal como se menciona hoy sábado en un artículo de zenit.org).


La teología del gusano es una manera de entender a Dios y su relación con los seres humanos que inclina a estos a sentirse gusanos indignos, en lugar de hijos dignísimos del Padre, viendo que todo lo que hacemos y vivimos no es digno de Dios, generando una conciencia culposa (hacia uno) y culpable (hacia los demás).


AutoestimaEsta perniciosa teología se manifiesta y actúa en creencias más deshumanizadoras que liberadoras, como, por ejemplo, la creencia de un Dios que gusta del sufrimiento para alcanzar la salvación, también vive de la crueldad y de la venganza –una caricatura de Dios que, tristemente todavía late en el imaginario religioso de muchos fieles, con refranes tan comunes como "Dios castiga, pero no a palos"-, en lugar del Dios de Amor y que perdona "setenta veces siete", que Jesús proclama a cada instante en su Evangelio..


“Ama al Señor tu Dios.. y ama a tu prójimo como a ti mismo”, dice el Evangelio de Lucas, ello no quiere decir que uno no se pueda amar, todo lo contario, nuestra forma de amar a Dios se condice en la manera de cómo nos amamos. Autoestima y Evangelio no son incompatibles. En cuaresma tengamos también en cuenta que la penitencia es purificación no mortificación culposa, es ascética del espíritu, para dejar de lado el egocentrimos y volvernos hacia Dios.


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Comentarios

  1. Cuando termina la autoestima y comienza el "egocentrismo"; es decir, la autoestima que es "compatible" y coincidente con el amor de dios...en donde participamos esperanzadoramente de su dignidad mayestática y nos hacemos acreedores de la posible salvación; y egocentrismo que es "incompatible" e incoincidente con sus favores y buenaventuranzas, y vivimos -sin esperanzas- en las tinieblas de la venganza, la crueldad y la deshumanización?.
    Es decir, somos candidatos inequívocos a los ergástulos flamígeros del averno.

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  2. Puede que en la misma etimología de la palabra egocéntrico está la clave de nuestra condenación. Centrarse en uno mismo, y no ver a los demás, ni a Dios. En cambio el amor a sí mismo lleva a mirarse y valorar nuestra persona, y luego valorar lo que está a nuestro alrededor. ¿Cuál es la sutileza de la salvación y la condenación?: el amor. Ahí está la clave, amar y ser amado.

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  3. No sé si fue Fedor Dostoievski, quien en un pequeño relato contó cómo el rico Epulón cuando subió al cielo, se encontró con toda la gente que compartía y se ayudaba, y vio que no era su lugar, y partió al infierno.

    Las acciones nuestras, fuera del tiempo y del espacio que conocemos se hacen eternas... uy si hemos sido egoístas.

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  4. En general la mayoría de las visiones religiosas occidentales son perniciosas y en ellas pareciera que uno tuviera que pedir perdón para vivir.
    Es una lástima porque si le enseñan a uno mismo a mirarse con ese miedo y esa insignificancia, la impotencia el inicio de todo es abrumadora.
    Aprender y atreverse son cosas básicas en la vida que con esta visión religiosa pueden aparecer cortadas.

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  5. Con todo respeto Galgata, pero me parece que eso de "la mayoría de las visiones religiosas occidentales son perniciosas" me parece una generalización, como mínimo, exagerada.
    No se puede negar que hay gente que vive como vos decís: "pareciera que uno tuviera que pedir perdón para vivir", pero eso es resultado, más que de una religiosidad auténtica, de una manera burda e infantil de vivir (por lo menos en este caso) el cristianismo.
    Vos podés tener la religión más excelsa del universo, pero si la vivís mediocremente, no sólo vas a vvir una caricatura de esos principios, sino que además, vas a dar una imagen igualmente mediocre de esa religión.
    La "culposidad" también es una forma de egocentrismo, rechazada de plano por el cristianismo. La "culpa" cristiana pasa por un reconocimiento objetivo de los errores cometidos, y una asumición adulta de la responsabilidad que tenemos en ellos. Pero ambos son "pasos" de algo más importante, o sea, de lo que llamamos "conversión": el cambio de actitud, la rectificación del error, la reparación del mal del que podamos ser responsables, para seguir hacia adelante.

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  6. Hola...
    "Felisiteichons" por tu blog!
    Un agrado ver gente sensata y clever, católica y jugada...
    salu2

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  7. "Culposidad"..."culpa"; que manera de acomodar las palabras a cegueras dogmáticas. Se amasan, se adoban, se manipulan como el mas pintiparado estribidor de juzgado de letras. El catolicismo con sus doctrinas tan concluyentes no se ha percatado aún de la elasticidad de las palabras.

    CULPA: Sentimiento que se expresa como la necesidad de castigo, o por haber transgredido alguna norma instituida por una autoridad significativa o sólo por pensar transgredirla. Corrientemente la Autoridad máxima es el Padre o sus representantes: maestro, ley, Dios, etc.


    La fé, señores, no hay para que alimentarla -como el carbonero unamuniano- es o no es.

    Cuando San Pablo, andaba, aún dudando de su creencia, decía: "Creo Señor, ayuda a mi incredulidad"; pero una vez que la gracia de la fé se apoderó de su ser, permaneció callado mucho tiempo.

    Por otro lado creo que la fé auténtica es incomunicable. Cuando nos ponemos a exteriorizar la fé, cuando queremos objetivizarla, daja de ser fé y se convierte en una "actuación"; y en muchos casos en una "sobreactuación". Eso está bien para el marketin de la iglesia; pero no para auténticos profesores (de pro-fe-sar) de la fé.

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  8. los predicadores evangélicos son particularmente proclives a empezar sus peroratas culpando a los oyentes de sus pecados. La idea es hacerlos ver tan indignos y miserables, que todos se sientan mal por lo que son. Luego viene la pastilla, el paracetamol: el predicador les ofrece la salvación de jesus, gratis.

    Y todos somos buenos, y la lágrima nos corre por la mejilla.

    Otra vez, hijos de Dios, reconciliados con no sé quién. De lo más interesante todo el show emocional que se monta.

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  9. Estimado/a Irreverente:

    1- Si vas a hablar con un Swajiri de lo que significa vivir en sociedad, primero vas a tener que aprender a hablar según lo que él entiende por sociedad, y además vas a tener que aprender un poco de su organización tribal, concepto de autoridad, relaciones inter pares, etc, etc.
    Si caés en un blog que habla desde una perspectiva católica ¿qué te cuesta tener el mínimo de respeto intelectual y tratar de entender qué entendemos los católicos bajo el concepto "culpa"? Digo, ¿no? Supongo que no te estoy pidiendo mucho.
    2- No entiendo bien, a ver si me lo aclarás: "Por otro lado creo que la fé auténtica es incomunicable. Cuando nos ponemos a exteriorizar la fé, cuando queremos objetivizarla, daja de ser fé y se convierte en una "actuación"; y en muchos casos en una "sobreactuación"" Bueno, a ver ¿preferís entonces que nos volvamos hipócritas, o que nos volvamos esquizofrénicos? ¿Guardamos una ética "interior" y otra exterior? ¿promovamos unos principios en casa y otros en la sociedad? ¿hagamos de la fe algo intimista y paranoico que no tenga nada que ver con nuestra vida social e interpersonal? Aclarame porque no entiendo.

    "¿De qué le sirve a uno decir que tiene fe si no tiene obras? ¿Acaso esa fe puede salvarlo? ¿De que´sirve a uno de ustedes, al ver a un hermano o a una hermana desnudos o sin el alimento necesario, les dice: vayan en paz, caliéntense y coman. Y no les dan lo que necesitan para su cuerpo?. Lo mismo pasa con la fe: si no va acompañada de las obras, está completamente muerta... Muéstrame, si puedes, tu fe sin las obras. Yo en cambio, por medio de las obras, te demostraré mi fe"
    (Santiago 2,14-18)

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  10. "La verdad no demanda creencias. Los científicos no unen sus manos cada domingo, cantando '¡Sí, la gravedad es real! ¡Tendré fe! ¡Seré fuerte! Creo en mi corazón que lo que sube tiene que bajar. ¡Amén!'. Si lo hicieran, pensaríamos que están bastante inseguros de ello."

    Dan Barker ex-predicador

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  11. ¿La verdad, Irreverente? me parece muy bien que los científicos no hagan semejante cosa. Si no no sería ciencia lo que hacen.
    Ahora, si la onda es endiosar el modo científico de ver la realidad como si fuese el único .... bueh ... qué se le va a hacer, sobre gustos ...

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  12. Anónimo12:11 a.m.

    Al parecer, esta teologia se esta extendiendo. El resultado: afecta a los mas proclives a ser manipulados, como son los niños y adolescentes, sobre todo a los hijos de padres "evangelicos".

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